Mattea es una opción para los amantes de las pastas frescas hechas en casa y que rinde homenaje a la cocina italiana. Está en un espacio acogedor en Las Lomas, donde el diseño de interiores, a cargo de Eloisa, es de los colores de otoño y cada elemento está muy bien pensado.
Desde que llegas a este restaurante, te deleitas de unos sabores deliciosos, pues el pan ,que es lo primero que llega cuando el comensal se sienta a la mesa, junto con aceite de oliva y balsámico, se hace de masa madre en casa y es tan cardinal para el proyecto. También puedes pedir de aperitivo unas aceitunas marinadas con críticos, que prosciutto madurado con higos o platos de quesos. Las entradas son todas fantásticas, es difícil escoger sólo una. El chef, Axel Vásquez, recomienda las almohadillas de parmesano con prosciutto que no están en el menú; una delicia crujiente. Después recomienda pedir las alcachofas a la romana confitadas con limón, menta y salsa de anchas. De plato fuerte, una lasaña tradicional y un ravioli gigante relleno de queso ricota. Para finalizar, los postres son inolvidables. Tienen una variedad de sorbetes sin lácteos muy ricos y su tiramisú es el cierre prefecto de una comida muy especial.
Dirección: Monte Ararat 98
